lunes, 9 de septiembre de 2013

ANSIEDAD

Por. Yania Salazar





Un deseo reprimido que necesita con urgencia ser colmado.

La sensibilidad que tiene nuestro cerebro de captar impulsos que se encienden y apagan como luces intermitentes basan su accionar en la quimica por eso el origen de la adicción.

El origen de esta sed tan atenuante y desbordante a la que no obedece voluntad y a la que se debe gran parte de los problemas relacionados con los hábitos y adicciones es motivo de estudio ya que se precisa que a nivel comercial en productos se están utilizando sustancias que generen dependencia en los consumidores, también es importante considerar la gama de artículos cuya publicidad tiende a despertar ansiedad, por ejemplo el mercado de tabaco y licor.

El condicionamiento es mental pero la abstracción es plenamente física, no puedo decir que siento ansiedad por dormir porque en seguida el deseo se coarta cuando me duermo en realidad, la ansiedad deriva en nuevas ganas por consumir y seguir en esa tónica, y el prototipo habitual es el de caer en una crisis nerviosa hasta tanto sus deseo no sea satisfecho.

Apagar la ansiedad significa complacer con sustitutos tal ansia y manejar efectos colaterales como la ira, la depresión y frustración, de todas formas hay que trabajar sobre la voluntad de la persona a fin de fortalecer y prevenir recaídas.





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