NO NOS DEBEN LLAMAR PUTAS

EN LA CALLE

MALEV

DAMA 1

DAMA 2

(En el paradero de buses)

DAMA 1: - ¿Tendrá usted un cigarrillo ó aunque sea una moneda?

MALEV: - Mire, señorita (le aproxima una caja de cigarrillos)

DAMA 1: - Gracias Monita, mire que no hemos almorzado, ni cenado no hay dinero, no hay clientes y solo este frío odioso reina en esta calle

MALEV:- La situación es díficil para todos (Trata de apartarse, pero la mujer la sigue)

DAMA 1: - Tranquila Mona a usted no le haría nada, usted es la salvación, yo no soy una puta, no deben llamarnos putas, nosotras las que alquilamos el cuerpo somos damas de compañía, no nos juzgue si la sociedad nos ve con malos ojos.

MALEV: - Pero es que hay otras alternativas

DAMA 1: - Supiera usted qué hemos pasado para llegar hasta acá, nada es gratis

MALEV: - Pero siempre habrán otras posibilidades

DAMA 1: - Nadie nos quiere dar trabajo, muchos hombres dicen que somos nosotras quienes sabemos más del amor que cualquiera, pero vivimos clamando legalicen el amor como una manera de que cualquiera pueda tener su dósis de amor y ser feliz.

DAMA 2: - (Apareciendo) Tiene un cliente mamita

DAMA 1: - Cruce los dedos Mona (Se va, y queda la otra mujer)

DAMA 2: - Todas al fin de cuentas nos entregamos por un deseo, unas de amor y otras de dinero (Se va)