Por: MALEV
Terapeuta: - ¿Qué tienes en contra del matrimonio?
Malev: - Nada, solo que un día me arrepentí, cuando hablando con mi esposo surtió el tema de la infidelidad y él simplemente me dijo "el día que me seas infiel ese día te mató". El asunto toma su dimensión cuando piensas en que eres incapaz de ser infiel al hombre que amas pero de allí a que él esté dispuesto a matar, entonces piensas - con qué clase de ser me casé -
Terapeuta: - ¿Entonces el problema no es sobre el matrimonio en sí?
Malev: - El contrato matrimonial a veces pacta lo que una, en mi caso no está dispuesta a soportar (ni a entregar) el amor es ilusionarse y embriagarse de sentimientos, pero cuando te toca asumir una responsabilidad y te toca pagar los platos rotos no puedes decir simplemente - ¿te puedo pagar con amor? -
Terapeuta: ¿Le temes a el compromiso?
Malev: ¿Y quíen no? e hice esta prueba con un novio al que yo quería demasiado y que en la intimidad me preguntó si podíamos hacer el amor sin preservativo y mi respuesta tácita fue - listo, pero si quedo en embarazo me respondes - el hombre enfundó su miembro en un condón y no dijo más. El matrimonio te enfrenta a una convivencia obligatoria, pierdes libertad e intimidad y el egoísmo siempre va a estar allí.
Terapeuta: - ¿Y cúando vienen los hijos el matrimonio se afianza?
Malev: - El otro día escuché a una chica que comentaba sobre cuán emocionado estaba su pareja al saber que iba a ser papá, recordaba el miedo que yo sentía cuando le iba a dar a mi esposo la noticia, me preocupaba la situación económica, pero más lo que pensarían en mi casa y en la de él. Pasó todo y ahora me resigno a pensar que lo que importante de todo era que asumiera mi situación para que todo saliera bien, es decir lo que importaba más era mi persona y la criatura, nadie ni nada más.
Terapeuta: - Ahora que te has separado ¿le temes a una relación que conlleva a un nuevo matrimonio?
Malev: - Una no puede decir de esta agua no beberé, he estado muy enamorada pero he sabido parar a tiempo las repercusiones del amor y creo que el día que alguien se quiera casar conmigo es porque al igual que yo está demente.
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