Por Alejandra Erazo & Xervantex
"Si te portas bien ganas el cielo, si te portas mal ganas el infierno. De todas formas ganas"
ELLA: Aquí va a pasar algo, no lo sé, pero qué clase de caballeros son estos que llevan a una dama a un burdel y ellos se van con sus divas a hacer lo que bien parece se hace acá, menos mal mi amigo V se quedó porque sino parecería una más, sentada en la barra disponible para cualquier morboso de los que aquí hay.
EL: No es por excusar a nadie, fue que nos cogió la noche y al parecer no hay otro lugar para pasar la noche, estamos esperando desocupen una habitación, nos hemos quedado mientras tanto en el bar, no creo que Maleja acepté dormir en un cama donde quién sabe que clase de gente se acostará a hacer sus cosas. Los otros ya deben estar durmiendo.
ELLA: Me escape a afuera para ver si pasa algún auto que nos acerque a la civilización, pero la oscuridad es aterradora, el dueño del negocio dice que no hay otro lugar en kilómetros y me mira con cierta malicia, pido un trago y miro que la gente sigue llegando ¿de dónde vienen? todos son hombres y me miran constantemente.
EL: La habitación ha sido desocupada, le insisto a ella para que vaya a descansar, el dueño me pasa un juego de sábanas nuevas y una toalla, ella insiste que en la cama no dormirá, el dueño me facilita una hamaca, ella me pone la condición de que la acompañe, ella dormirá en la hamaca y yo en la cama.
ELLA: Mi amigo V es muy considerado, diría que es descomplicado, nada le causa asombro y todo le causa risa, se acomoda en la cama y parece que se queda dormido de inmediato a mi me es dificil conciliar el sueño y menos cuando no estoy acostrumbrada a dormir en una hamaca, afuera hay discusiones, peleas y gritos.
El: De todas formas va a amanecer en tres horas, afuera todo yace en silencio, me levanto espio por la ventana y de repente ella me pregunta si pasa algo -nada- le digo y mejor será dormir y cuando veo que parece incómoda en la hamaca le digo "tranquila si te caes yo te recojo", ella sonrie.
ELLA: La espalda la tengo arqueada, mi amigo V sigue dormido y yo desisto de seguir acostada en la hamaca voy al bar pero no hay nadie, tomo de la nevera un jugo, una a una las Prostitutas van saliendo de cada cuarto y hacen lo mismo que yo, me miran y quizá piensen que soy una más.