sábado, 26 de enero de 2013

DE PATITAS EN LA CALLE

MALEV





Y quién no se acuerda del UPAC la unidad de pagos por capitación que desbanco a más de uno y le sentenció a pagar su casa dos veces. Los economistas piensan que todo lo fiado es más barato y para el colmo que si se cosen los bolsillos y se afilan el codo serán más "rentables"; los analistas del gobierno viejos zorros establecieron que para hacer accesible al crédito de vivienda los bancos debían cobrarle más a los pobres, y entonces presentaron un modelo de robo programado. Todo esto para en palabrería cuando la realidad se torna más cruda, familias que pierden su casa por no poderla pagar, y aunado esto a un sistema de hipoteca donde el arrendamiento corresponde pagárselo a un Banco. Y entonces en la lucha van los de la Ley con soberbia a desalojar a las familias a la f-u-e-r-z-a. En mi momento al Banco le fuí a dejar la llave de mi casa y cuando me vinieron a cobrar intereses les dije que la casa tampoco estaba vacía, los muebles, la cocina, las camas, todo. Y entonces me enviaron de cobrador a un hombrecillo con pinta de bufón que me decía "señora, comprenda usted" y a sabiendas que el Banco quería el dinero en lugar de cosas, me vestí de callejera por no decir malas palabras y al Gerente del Banco le insinué que por culpa suya ahora estaba trabajando en la calle, el muy atento y sonrojado humano macho ordenó valorar el contenido de la casa generosamente y luego si las cuentas quedaron saldadas.

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