Por César Vélez
La ambición de la guerra es la paz, unos ponen los vivos y otros los muertos.
- Machi no quiere prestar el servicio militar- dijo doña Pola
Allí se percataron todos que hasta para eso era doña Pola mala mamá.
El tal Machí dizque anda con los de la secta, se pintó el pelo de rojo y viste de estricto negro y además de unos arañazos en plena cara para parecer felino se hizo unos tatuajes de dragones.
La pobreza allá arriba da para todo inclusive para preferir el hambre por encima de la aceptación social.
El otro día el Machí se salvó de caer en un retén, puso cara de recién nacido y paso por menor de edad. Menudo trauma si se armó cuando los del alto le fueron a decir a doña Pola " ó lo afina o lo afinamos" lo que querían era decirle que ya dejé la bobada de andar vestido como payaso y se decida a ser reclutado en el combo.
Luego de dos años volvió gordo y blanco dicen que se fue a prestar el servicio militar y parece que le sentó, los del alto no más lo miraron le dijeron que era un desertor y él como que ni se inmutó a todas estas dicen por allí que allá en el cuartel aprendió a matar con cada dedo de la mano ó del pie.
Lo peor fue que el Machi volviera armó combo y luego se fue a buscarles pelea a los del alto.
Todos dicen que la culpa la tiene doña Pola por mentir tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario